Antonio Espinosa de los Monteros, un grabador e impresor nacido en Murcia en 1732, creó hace ya 250 años una familia tipográfica que aún hoy sigue siendo motivo de investigación y sirve de inspiración para proyectos creativos.
La familia tipográfica ideada por Antonio Espinosa es conocida con el nombre de Ibarra, ya que fue empleada por vez primera en 1772 por el editor Joaquín Ibarra para la impresión del libro del historiador romano Cayo Salustio La conjuración de Catilina y la guerra de Yugurta.
Espinosa destacó como uno de los más acreditados grabadores e impresores del siglo dieciocho español, siendo además un diestro punzonista, denominación que recibían los expertos en fundir los tipos de letra que se empleaban en las artes gráficas hasta casi finales del siglo veinte, cuando comenzó a implantarse la composición digital.
Después de formarse en el colegio de San Fulgencio de Murcia, Espinosa estudió dibujo en Roma durante tres años. De nuevo en España, fue discípulo del grabador y medallista Tomás Francisco Prieto. En 1760 ingresó como académico de la Real de Bellas Artes de San Fernando, en Madrid. Trabajó como grabador principal en las casas de la moneda de Sevilla y Segovia e intentó sin éxito ocupar ese mismo puesto en la de Madrid. No obstante, Espinosa se establece como impresor en la capital de España. Su imprenta logra en pocos años convertirse en una de las diez más importantes de la ciudad.
La tipografía Ibarra fue reconstruida digitalmente en 1993 por miembros del Grupo de Informática Gráfica Avanzada de la Universidad de Zaragoza, estando desde entonces disponible para su uso en diferentes formatos de fuentes. Puede descargarse a través de este enlace.
La familia creada por Antonio Espinosa ha servido también de inspiración al diseñador Mario Sánchez, quien hace dos años creó Ganso, una tipografía para texto corrido. «La tipografía de Espinosa, aunque no comparte la calidad de las producidas por algunos de sus coetáneos como Eudald Pradell o Jerónimo Antonio Gil, si que tiene un encanto especial en las formas que hizo que me fijara en ella”, opinó en su momento el diseñador residente en Madrid. Este proyecto se puede disfrutar en el portfolio de Mario Sánchez en Behance.
